martes, 18 de enero de 2011

Solo de Jimmy Raney sur un "Rhythm changes"




Solo de Jimmy Raney sur un 'Rhythm Changes'
Jamey Aebersold propose une large collection de livres / CDs de ‘minus one’, couvrant la plupart des époques et des courants du jazz. Un ‘minus one’ est l’enregistrement d’un groupe sans un instrument permettant à l’auditeur d’être aussi acteur et de jouer l’instrument manquant. Par exemple, un accompagnement sans soliste, qui permet de jouer et de pratiquer des morceaux sur une base intéressante, qui change du métronome.

Le volume 20 de la collection est différent, et réalisé en collaboration avec le guitariste Jimmy Raney, qui y propose des solos sur divers standards de jazz. Les solos sont intéressants à analyser et apprendre pour qui veut développer son phrasé bebop, que l’on joue de la guitare ou d’un autre instrument mélodique. Dans la vidéo je joue le solo que Jimmy propose sur ‘Rhythm Changes’, d’abord à vitesse réelle puis lentement pour que vous puissiez voir les doigtés.


Solo de Jimmy Raney en un 'Rhythm Changes'
Jamey Aebersold propone una amplia colección de libros / CDs de ‘minus one’, cubriendo la mayor parte de las épocas y corientes del jazz. Un ‘minus one’ es una grabación de un grupo al que falta un instrumento, lo que permite al oyente ser un actor más y tocar el instrumento faltante. Por ejemplo, un acompañamiento sin solista, que permite tocar y practicar un tema sobre una base interesante, que cambia del metrónomo.

El volumen 20 de la colección es distinto: realizado con la colaboración de Jimmy Raney, propone solos sobre varios standards de jazz. Son interesantes de tocar y analisar para quien quiera desarrollar su fraseo bebop, tanto para guitarristas como otros intrumentos melódicos. En el video tocoel solo que propone Jimmy en un 'Rhythm cahnges', primero a velocidad normal, y luego lentamente, para que se vean las digitaciones.


Jimmy Raney's solo on a Rhythm cahnges
Jamey Aebersold proposes a huge collection of books / CDs of ‘minus one’, covering most of jazz styles. A ‘minus one’ is a recording of a band with one instrument missing, which allows the listener to be also a player, since he can play missing instrument. For example, a comping without soloist allows playing and practicing songs on an interesting base, different than metronome.

Volume 20 of the collection is quite different: Jimmy Raney presents solos on some jazz standards. These solos are interesting to play and analyse, in order to improve your bebop phrasing, not only for guitarists but also for other melodic instruments. In the video I play the solo that Jimmy proposes on a Rhythm changes, first fast, then slow, so that you can see fingerings.
Find the sheet music of the solo in Aebersold's collection volume 20.

miércoles, 5 de enero de 2011

Accompagnement guitare sur un II/V/I mineur




Accompagnement en walking bass et accords sur un II/V/I mineur
Voici un exemple d'accompagnement pour guitare sur la cadence II/V/I mineure en do, en walking bass et accords. Il est intéressant de transposer cet exemple pour se familiariser à d'autres tonalités.


Acompañamiento en walking bass más acordes sobre un II/V/I menor
El ejemplo que sigue es un acompañamiento para guitarra, sobre un II/V/I menor en tonalidad de do. Un ejercicio interesante consiste en transportarlo, para familiarisarse con otras tonalidades.


Guitar comping on minor II/V/I, walking bass and chords
Here is a guitar comping in walking bass and chords, on minor II/V/I.

Partition :

martes, 4 de enero de 2011

"Nuestro mejor profesor somos nosotros mismos"


Entrevista con Antonio Bravo

Antonio Bravo es guitarrista y profesor de música. Aunque resida en Madrid desde 1993, algunos de sus proyectos siguen teniendo acento Gallego (Ribeira es su tierra natal). Es el caso por ejemplo de su colaboración con el “Proyecto Minho” de Baldo Martinez, cuyo disco ha sido bien recibido por la crítica especializada internacional, o del disco en duo con el zanfonista German Diaz, "Músicas Populares de la guerra civil" (Producciones efímeras) que ha sido seleccionado como segundo mejor disco de jazz del año 2008 por la revista "Cuadernos del Jazz". Se empezó a formar en Santiago, y completó sus estudios en Madrid y Barcelona, antes de participar en cursos de ampliación de estudios en Siena y Dublín, donde ha recibido clases de David Liebman, entre otros (ex Miles Davis Band).
Ha sido profesor y elaborador del programa de guitarra de “Estudio Escola de Música” de Santiago de Compostela y, en la actualidad, imparte clases de guitarra, armonía, combo, y polimetría para no percusionistas, en el Aula de Músicas de Madrid.
Es un músico curioso que no se cansa de buscar nuevos cáminos, y sus proyectos actuales aportan un aire nuevo a la escena de jazz española.





¿Qué te llevó a dedicarte a la música?
Fui un melómano prematuro. Con 12 0 13 años escuchaba música de forma compulsiva. Un compañero de colegio un par de años mayor que yo, tenía una enorme colección de discos y lo recuerdo como uno de mis mejores profesores de música. Me recomendaba discos y yo los disfrutaba tanto que al final decidí hablar con mi madre para que me pagase unas clases. El día que se lo propuse, con 13 años, ella me dijo: "¿no querrás dedicarte a la música verdad?". Ella estaba acostumbrada a verme durante horas delante de un tocadiscos. Le mentí. Le dije que no aunque yo ya lo tenía claro. Las mujeres, como mi madre, que nacieron en la posguerra relacionaban a los músicos de rock con las drogas, y la verdad es que no estaban muy equivocadas.


¿Por qué el jazz? ¿Tocas otros estilos?
Empecé tocando rock y también estudiando algo de guitarra clásica. Hice unas cuantas grabaciones y giras con grupos de rock y pop. Pero la primera vez que vi un grupo de jazz en directo me impresionó la técnica de los músicos y también su actitud. Solo pensaban en la música. El mundo del pop y rock está totalmente perdido en la imagen, las luces de colores. Es más importante ser guapo que sonar bien. Cuando escuché a estos grupos de jazz en un garito cutre con equipo modesto, bajo la luz de una bombilla, vestidos como cuando van al supermercado pero sonando de maravilla pensé: esto es lo mío. Todo esto coincidió con la apertura de "Estudio escola de Música" en Santiago, donde me matriculé. A los dos años me propusieron ser profesor y estuve allí estudiando y trabajando 6 años. Luego tuve algunas becas para estudiar en Dublín, Siena y Lisboa. A veces coqueteo con otros estilos pero hay que tener en cuenta que la palabra jazz realmente ya abarca muchas variaciones de estilos.


¿Cuántos años llevas tocando?
Da vértigo pensarlo: unos 30


¿Cuántos años llevas enseñando?
"20"


¿Qué recuerdos tienes de los cursos que seguiste con los grandes (Abercrombie, Liebman…)?
Es una experiencia estar cerca de estos monstruos. Cada nota que tocan suena bien y su capacidad de trabajo es impresionante. En general, los que he conocido son además buena gente aunque, como te puedes imaginar, también hay algún capullo que cuando no tiene el instrumento en las manos es un auténtico inútil. En el ambiente de alumnos a su alrededor, son tratados casi como dioses y eso es algo que no me gusta. Admiro por supuesto a los grandes músicos pero los admiro mucho más si son gente con quién se puede hablar de otras cosas que no sea música.


¿Te sigues formando?
Si, claro. Estudio cada día y he recibido mi última clase hace un par de semanas con John Sowell, que es un tipo que tiene un lenguaje de acordes muy particular. De vez en cuando tomo clases de guitarra clásica. Pero sobre todo soy un autodidacta, claro. Nuestro mejor profe somos nosotros mismos.


¿Qué estás estudiando últimamente?
Estoy organizando un vocabulario de acordes abiertos y ‘clusters’. También integrando estos ‘voicings’ de forma vertical (arpegios) en los solos. Y trabajando mucho el sonido acústico.
Hay temporadas en las que estoy montando proyectos nuevos o preparando grabaciones y eso ocupa todo mi tiempo.


¿Qué consejo(s) puedes dar a una persona que quiera empezar a tocar jazz?
Eso de los consejos es para los sabios. Pero le recomendaría lo mismo que a una persona que quiera ser arquitecto o cualquier otra cosa. Que luche por hacer en la vida lo que realmente le gusta. Y desearle mucha suerte. Si va a tocar jazz la va a necesitar.
Ser músico de jazz en España es algo casi heroico. Vivimos en un mundo donde solo parecen tener futuro los banqueros y los constructores.Pero hay cosas que no se pueden comprar con dinero. Cuando consigas que la música suene bien, cierra los ojos y disfruta. Es mi único consejo.

Para más información sobre Antonio Bravo y sus proyectos, consulta su myspace y su página web.